Esta é a vida eterna: que te conheçam, o único Elohim verdadeiro, e a Yeshua o Messias, a quem enviaste. JOÃO 17:3
11 RAZONES PARA RECHAZAR LA “SANTISIMA TRINIDAD”
11 RAZONES PARA RECHAZAR LA “SANTISIMA
TRINIDAD”
Hablando de mentiras vamos con una de las mas gordas de la historia de la humanidad.
Hoy en cierto blog del que normalmente discrepo se ha publicado una entrada acerca de la Trinidad. Y en esta ocasión no le falta razón cuando expone las razones que expone para rechazarla.
Pero yo quería añadir las que ya expuse hace tiempo en el sitio del que disponía y publicaba anterior a este y así hacer una especie de complemento mas completo ya que hace tiempo que no se habla aquí de la mentira de la Trinidad.
Juntando las ideas totales la conclusión a la que llegamos para deducir que la “Santísima Trinidad” no es una enseñanza bíblica vienen a ser estas:
1-Ni la palabra Trinidad, ni la doctrina explícita como tal, aparecen en el Nuevo Testamento. Pero ni siquiera en el antiguo podemos encontrar apoyo para ella, mas bien al contrario. Por ejemplo:
“Escucha, oh Israel: Jehová nuestro Dios es un solo Jehová “(Deu. 6:4).
Dios dice que él es el único
2-Miles de veces en toda la Biblia, se habla de Dios como una persona. Cuando habla, es como una persona íntegra. La Biblia no podía ser más clara al respecto. Como Dios dice: “Yo soy Jehová. Ese es mi nombre; y a ningún otro daré yo mi propia gloria, ni mi alabanza a imágenes esculpidas.”(Isaías 42:8)
3-Los escritores de la Biblia hubieran dejado claro que la Trinidad si hubiera sido verdadera, pero mas bien los escritores de la Biblia dejan muy claro es que Dios es una Persona, única, y sin particiones. Un Ser que no tiene igual: “Yo soy Jehová, y no hay ningún otro. Con la excepción de mí no hay Dios.”(Isaías 45:5)
4–“Tú, cuyo nombre es Jehová, tú solo eres el Altísimo sobre toda la tierra.”Salmo 83:18.
Nadie más en la Biblia se llama El TODOPODEROSO
5-Jesús llamó a Dios “el único Dios verdadero.” (Juan 17:3)
6-Hech. 7:55, 56 informa que a Esteban se le dio una visión del cielo en la que vio “a Jesús de pie a la diestra de Dios”. Pero no se menciona que viera al espíritu santo.
7-Mat. 26:39: “Adelantándose un poco, se postró [Jesucristo] rostro en tierra, orando y diciendo:Padre mío, si es posible pase de mí esta copa; sin embargo, no se haga como yo quiero, sino como tú.” Si el Padre y el Hijo no fueran individuos distintos, dicha oración habría carecido de significado. Jesús hubiera estado orándose a sí mismo, y necesariamente la voluntad de él habría sido la voluntad de su Padre.
8-Juan 8:17, 18,Jesús contestó a los fariseos judíos: “En vuestra ley está escrito que el testimonio de dos hombres es verdadero. Yo soy el que doy testimonio de mí mismo, y el Padre que me envió da también testimonio de mí.” Por eso, Jesús definitivamente se refirió a sí mismo como un ser separado y distinto del Padre.
9-Jesús nunca se refiere a Dios (Su Padre) como una deidad de personas en plural. Es por eso que en ninguna parte de la Biblia es llamado Todopoderoso, excepto Jehová. Si fuera lo contrario, entonces se anularía el sentido de la palabra “Todopoderoso”. Ni Jesús ni el espíritu santo son llamados así, porque Jehová es el único supremo.
10-Dios no podía tener la tentación de unirse a una causa contra sí mismo Jesús habla como quien fue ”tentado por el diablo.” Después de mostrar a Jesús “todos los reinos del mundo y la gloria”, dijo Satanás: “Todas estas cosas te daré si caes y haces un acto de adoración a mí.” (Mateo 4:8, 9). Satanás estaba tratando de provocar a Jesús para que fuese desleal a Dios. Pero, ¿qué prueba de lealtad sería ésta si Jesús fuera Dios? ¿Podría Dios rebelarse contra sí mismo? No, pero alguno que no fuera Dios podía rebelarse contra Dios. La tentación de Jesús sólo tendría sentido si él no fuera Dios, sino un individuo separado que tenía su propia voluntad, una que podría haber sido desleal si hubiera optado por ser un siervo. Por otro lado, es inimaginable que Dios pudiese pecar y ser desleal a sí mismo. “Perfecto es su actividad… Dios de verdad,… Justo y recto es él”. (Deuteronomio 32:4) Así que si Jesús hubiera sido Dios, no podría haber sido tentado.”Al estar bajo prueba, que nadie diga: “Dios me somete a prueba”. Porque con cosas malas Dios no puede ser sometido a prueba, ni somete a prueba él mismo a nadie“. (Santiago 1:13.)
No siendo Dios, Jesús pudo haber sido desleal. Pero se mantuvo fiel, diciendo: “¡Vete, Satanás! Porque está escrito: ‘Es a Jehová tu Dios a quien tienes que adorar, y es solo a él a quien tienes que rendir servicio sagrado’”. Mateo 4:10. ¿Cómo puede Dios adorarse a él mismo y hablar en tercera persona?
11- En cuanto al espiritu santo como persona serian contradictorios estos textos: “y yo pediré al Padre, y él les dará otro ayudante que esté con ustedes para siempre, el espíritu de la verdad, que el mundo no puede recibir, porque ni lo contempla ni lo conoce. Ustedes lo conocen, porque permanece con ustedes y está en ustedes”. (Juan 14:16, 17,) Aquí Jesús habla de el espíritu santo en tercera persona, por lo que la está separado de él.
” Pues bien, al oír Elisabet el saludo de María, la criatura saltó en su matriz; y Elisabet se llenó de espíritu santo” (Luc. 1:41). ¿Como puede llenarse una persona de otra persona?
“Yo, por mi parte, los bautizo con agua a causa de su arrepentimiento; pero el que viene después de mí es más fuerte que yo, y no soy digno de quitarle las sandalias. Ese los bautizará con espíritu santo y con fuego”.(Mat. 3:11)
“a saber, Jesús que era de Nazaret, cómo Dios lo ungió con espíritu santo y poder, y fue por la tierra haciendo bien y sanando a todos los [que eran] oprimidos por el Diablo; porque Dios estaba con él”.(Hech. 10:38)
Está claro que estas ultimas referencias al espíritu santo no corresponden a una persona. Para comprender lo que la Biblia en conjunto enseña, hay que considerar todos estos textos. Los primeros textos citados aquí emplean lenguaje figurado para personificar al espíritu santo de Dios, su fuerza activa, así como la Biblia también personifica la sabiduría, el pecado, la muerte, el agua y la sangre.
Las Sagradas Escrituras nos dicen el nombre personal del Padre… Jehová. Nos informan que el Hijo es Jesucristo. Pero en ningún lugar de las Escrituras se aplica un nombre personal al espíritu santo.